Reseña libro: Tan poca vida de Hanya Yanagihara
He leído ya mucho, muchas novelas, sobre todo novela contemporánea y a estas alturas tengo muy claro lo que me gusta y lo que no, lo que a mí parecer es bueno y lo que no lo es, subjetivamente siempre claro, porque no soy yo quien para valorarlo de otro modo ya que me falta formación específica. Esta novela: Tan poca vida, decir que me ha gustado sería quedarme corto, Hanya Yanagihara está a otro nivel.
Tan poca vida te cambia la percepción de la novela contemporánea.
Ya se sabe que las editoriales tienen que vender sus productos y por lo tanto, en las ediciones que siguen a la primera de un libro superventas como ha sido Tan poca vida, ponen los comentarios destacados interesantes que de la obra han dicho personas relevantes, pero luego hay veces, que si lees eso y luego el libro, puedes llegar a preguntarte si ese comentario se refería a ese libro o tal vez era a otro. De Tan poca vida he leído cosas como que: “te cambia la vida” o “es la novela que hubiese querido escribir” en este caso, en esta obra, los comentarios van completamente en consonancia con lo que ha escrito Hanya Yanagihara. Tal vez no me ha cambiado la vida, pero un poco si, en el sentido de que dudo que vuelva a leer algo tan potente, tan conmovedor y maravilloso, tan profundo y desgarrador. Tan poca vida ha dejado el listón tan arriba, que todo lo que estoy leyendo con posterioridad me parece mediocre, ridículo en comparación.
Tan poca vida es el mejor libro que he leído hasta ahora.
Como he comenzado diciendo, he leído mucho, bien, yo creo que es mucho, con 32 años he leído algo más de 500 novelas y no cuento otro tipo de literatura ni los prospectos del champú. Vengo a decir esto, porque sin ser ningún experto en literatura considero, que por el volumen de lo leído, algo de mi opinión puede tener interés para alguien y de ahí que me exprese aquí.
No había leído nunca antes un libro como Tan poca vida. No se trata de que la historia que desgrana sea tan potente que hable por sí sola, es sobre todo como la cuenta. Hanya Yanagihara, sea quien sea porque creo que es un seudónimo, tiene un nivel de comprensión del género humano abrumador, no puede ser de otro modo habida cuenta de lo que ha escrito.
No puedo hacer un spoiler del contenido del libro porque merece ser leído y paso a paso, irse sumergiendo en las procelosas aguas de la narración, solo diré que la historia tiene un único protagonista principal y otros 3 personajes secundarios, uno de los cuales tiene más peso que los otros en la narración. El protagonista de la novela sufre lo indecible, sufre de una manera tan bien narrada, que varías veces tuve que parar de leer porque el corazón se me aceleró y me dolía, tuve que parar con los ojos arrasados en lágrimas. Leyendo Tan poca vida cogí un berrinche monumental, lo que nunca me había ocurrido leyendo. Leyendo Tan poca vida tuve que parar y llamar a mi familia para agradecer la vida que me han dado y lo amado que me he sentido. Nunca había sentido tanto leyendo.
Tan poca vida no es para cualquier lector.
Dicho esto, no puedo evitar advertir, que esta maravillosa novela no es para cualquier tipo de lector, porque no es fácil de seguir. Necesitas al menos 300 de las más de 1000 páginas que tiene para entender de qué se está hablando y engancharte. Hay que haber leído bastante antes de enfrentarse a esta novela. Sólo tengo hacia Hanya Yanagihara palabras de agradecimiento por tanto como me ha hecho sentir leyendo su maravillosa novela: Tan poca vida.